Con el fin de que los niños ya ayudados no caigan en el olvido y sirvan de espejo a otros muchos en su lucha, hemos decidido nombrarlos socios de honor porque saben que existiendo solidaridad la esperanza nunca se pierde.

Son miembros de honor:

Diogo Farinhoto es de Portugal, impulsor de la recogida de tapones en Galicia, ha sido capaz  de unir dos países por una misma causa, la solidaridad. Diogo consiguió su objetivo.

Paula Nieto es de Boiro, movilizó a toda Galicia. Se propuso un reto que parecía imposible, a través de diversas campañas, consiguió todo el dinero que necesitaba y además el necesario para ayudar a otros 5 niños.

Ángel Blanco es de Lugo y ya tiene su andador, la gente se volcó con él tanto recogiendo tapones como con donaciones particulares. La familia está muy agradecida y dicen que Ángel es hoy, un poco más feliz, pero tambien nos recuerdan que hay muchos más niños y la marea solidaria no debe parar.

Alma Gil es de Vigo y padece una enfermedad incurable. El esfuerzo de muchos ha hecho posibles metas casi inalcanzables, se han recogido y seleccionado más de 6.000 kilos de tapones de plástico para esta causa. Hoy, Alma, ya sonríe un poco más.

Xosé Fernández era de Vigo, tenía 4 años y sufría una atrofia cerebral y epilepsia. Gracias a todos los amigos de Banta consiguió su grúa y su hamaca.

César Rodríguez es de Illa de Arousa, padece una Hipotonía global. Ahora que al fin ha conseguido su silla y su andador es el niño mas feliz de la zona.

Carlos Cambra es de Oleiros, Salvatera do Miño y tiene seis años. Se trata de un gran luchador que padece parálisis cerebral y desprendimiento de retina, tras el esfuerzo que todos hemos realizado ya podemos verlo disfrutar de su andador.

Adrián Chao es de Villalba, Lugo, tiene cuatro años y padece leucodistrofia. Necesitaba una silla para el baño y un pupitre, desde Banta hemos podido ayudarle consiguiendo ambas cosas.